L@s niñ@s empiezan a animarse a cocinar desde que son bien pequeños. Todos sabemos el tiempo que se pasa en la cocina cuando se tienen varios niñ@s en casa. Te ven, son curiosos y quieren saber. De forma natural, siempre están predispuestos, quieren ayudar, y no hay nada más divertido que mancharse las manos ayudando a papá o a mamá a preparar una rica comidita.
Pero no siempre les dejamos colaborar con nosotros. Muchas veces por si se manchan, otras porque se puedan hacer daño. Sólo hay que preparar un poco el sitio para cocinar con un poco de sentido común, de forma que ellos también puedan participar y podáis pasar un buen rato.
El tocar los alimentos crudos, hacer masa para pasteles, o incluso lavar los cacharros es una actividad muy divertida, de la que se aprende muchísimo, y ayuda a que entiendan de dónde vienen las cosas.
Las magdalenas no siempre se compran hechas, los filetes no vienen cocinados del mercado, y la verdura tiene muchos colores y formas distintas.
Aprenden a comer sano, les ayuda a utilizar la memoria para recordar sus recetas preferidas y el orden de preparación, fomenta el trabajo planificado, además pasan un buen rato con los mayores, haciéndoles sentir como iguales.
Cuando se ha terminado la preparación y es momento de comer, también se sienten responsables de la comida que han preparado.
Os proponemos que conozcáis el delantal de Seedling, que os puede ayudar a que las manchas de la cocina sean un poco más llevaderas.
Este delantal está pensado para que los niños lo decoren a su gusto. Está confeccionado con algodón natural, sin teñir, y tiene tres amplios bolsillos para llevar todo tipo de utensilios. ¿A que apetece hacer un rico turrón de chocolate? ¡Tenéis un buen rato de diversión asegurada!
Receta:
- 50 gramos de manteca de cerdo ibérico
- 60 gramos de cereales de arroz inflado de chocolate
- 125 gramos de chocolate negro
- 150 gramos de chocolate con leche.
Preparación:
- Troceamos los chocolates y los ponemos en un bol junto con la manteca de cerdo.
- Los mayores lo metemos en el microondas a máxima potencia durante un par de minutos.
- Lo sacamos del micro y (¡cuidado, que quema!) lo removemos bien hasta tener una pasta de chocolate homogénea.
- Añadimos los cereales de arroz y lo mezclamos.
- Por último, poner esta mezcla en un molde (un tupper, o un cartón de leche cortado por la mitad), y meterlo en el frigo durante un par de horas.
Cuando ya estemos limpitos, lo sacamos del frigo, le quitamos del molde, y… ¡a disfrutar!
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