Días, semanas, meses de vacaciones escolares, y sin planes fijos para hacer con los peques, pueden hacer que te agobies un poco. Para que esto no te pase, os hacemos una serie de propuestas para que el tiempo sea tan divertido para vosotros, como para los peques.

¡Vamos a la playa!

Un día en la playa puede ser uno de los mejores planes para el verano, o se puede convertir en un día insulso, aburrido y con ganas de irse nada más llegar. Con estos juguetes será más lo primero que lo segundo 😀

Días de piscina y jardín

El ratito de jugar al aire libre, darse un chapuzón, irse a la sombra a secarse, hacer unas pompas gigantes, volver a la pisci a bucear y a jugar con barcos… qué recuerdos, eh?

¡Y bien hidratados!

Hay que tener mucho cuidadito con la calorina, que a los peques se les olvida beber con tanto juego… Así que prepárate y no olvides las cantimploras que mantienen el agua fresca si es posible, o de las de tritán, súper resistentes y que aguantan carros y carretas…

Tardes de paseito

Los paseos suelen gustar más a los padres, por aquello de hacer un poco de ejercicio y bajar las comiditas veraniegas 😝, pero salir con la bici de equilibrio o el patinete siempre es un aliciente para los peques…

Noches exploradoras

Los días se alargan, sí, y con eso de que al día siguiente no hay cole, las noches también… y para aprovecharlas al máximo y aprender de la naturaleza mientras se divierten, estos accesorios vienen al pelo:

Agua que no moja

¿Que hace mucho calor pero no vais a la piscina ni a la playa?

Pues los peques se pueden refrescar con las esterillas de agua, ideales para pasar los calores veraniegos en casa, sin mojarse pero fresquitos